Desde Diamantina hasta Belo Horizonte son 315 kms de carreteras, en su mayoría, de tierra... así que seguimos bajando por la Estrada Real hasta que se hizo de noche y con un diluvio cayendonos encima llegamos a una posada en un pequeño poblado llamado Itapanhoa... aunque se habia ido la luz por la tempestad, nos prepararon una cena y pudimos dormir tranquilos.../ lo mejor fue la atención y que suerte que el calentador de agua era de gas....


nuevamente nos cruzamos con la policía deteniendo fuertemente a un carro... parecido a lo que vimos cerca de Boavista..../

cada curva es como un mirador....

a mitad de tarde llegamos a Belo Horizonte, capital del estado Minas Gerais.... es la 3ra ciudad mas grande de Brasil después Sao Paulo y Río....

pero en vez de visitar los museos y parques, decidimos dedicarnos a resolver otras cosas como la rotación de los cauchos.......

dormimos en un hotel Formula 1 como el de Belém y al día siguiente lavamos ropa en una lavanderia y le soldamos la base del hi-lift que se nos había roto....

fue bastante complicado conseguir una herrería donde nos soldaran la pieza, así que al final nos ayudaron en una chatarrera donde a pesar de que no fué un trabajo impecable como lo hubiese hecho Ruben, nos trataron super bien y pudimos resolver, que a fin de cuentas, era lo que queríamos.... de verdad que en lineas generales, la gente de Brasil es mucho con demasiado....

con el gato nuevamente en su lugar, salimos de la congestionada ciudad para ver si llegamos esa misma tarde a Ouro Preto....../
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